Título: los corazones de Ana
Autor: Ivette Chardis
Fecha de publicación: 12 diciembre 2019
Editorial: SELECTA
Idioma: Español
Género: Romántica Histórica
ASIN: B07ZS44K79
Longitud: 222 páginas
Precio: 1.99€ (ebook)
SINOPSIS
Una historia de amor con Valencia y Barcelona como telón de fondo.
La lucha de una mujer para hacerse un hueco en un mundo de hombres.
Un retrato de la mujer del siglo XIX.
Valencia 1834.
Me llamo Ana Villalba y provengo de una familia de carpinteros. Por desgracia, solo quedamos mi madre, mi sobrina María, y yo. El hambre acecha a nuestra puerta y la propuesta de la señora Ferrer ha llegado como caída del cielo: voy a engendrar a su hijo y, a cambio, el provenir de mi sobrina estará asegurado.
Sin embargo, yo no contaba con tener que permanecer escondida durante el invierno junto a la señora, en una casa recóndita en la montaña. Ni tampoco que Martín Ferrer, dueño de una fábrica de chocolate, fuera tan apuesto y recto en sus principios, desconocedor del arreglo de su esposa. Nunca llegué a pensar que el amor pudiera tener dos caras tan distintas y complementarias: el dulzor de un buen chocolate y la aspereza de la madera.
¿Será este mi destino?
¿Será mi corazón capaz de contenerse y cumplir con el trato?
Los corazones de Ana es el nuevo libro de Ivette Chardis, publicado por Penguin Random House Grupo Editorial, bajo su sello digital Selecta.
Hacía mucho tiempo que no leía este género, y al empezar a leer el libro no lo sabía, cosa que me ha sorprendido para bien, ya que también es uno de mis géneros favoritos.
En él nos cuenta el desprecio que había hacia la mujer en 1834 y lo que tenían que hacer para poder sobrevivir si el miembro masculino de la familia moría.
Es una lectura fresca, de esas que te enganchan desde la primera página y no puedes parar de leer.
Narrada en primera persona, nos cuenta la historia de Ana.
Ana
Ana proviene de una familia de carpinteros. Cuando su padre y un tiempo más tarde su cuñado mueren, se le viene el mundo encima, no tiene dinero y tiene que mantener tanto a su madre como a su sobrina. Su cabeza baraja varias opciones, pero ninguna que le convenga, si no quiere que hablen mal de ella.
Cuando la propuesta de la señora Ferrer llama a su puerta se ve obligada a aceptarla, tiene que engendrar un hijo para ellos y su vida se verá resuelta.
Lo que la señora Ferrer no le contó, es que el marido no sabía nada, y cuando se ve sola, acompañada de la señora y el ama de llaves, perdida en una casa en las montañas… su mundo se pone patas arriba. Lo único que la mantiene con los pies sobre la tierra es su don para tallar bien la madera y hacer lo que siempre le ha gustado.
¿Pero qué pasará cuando conozca de verdad al señor Ferrer?
¿Podrá su corazón mantenerse en el trato que ha hecho, o ganará el amor?
Mi valoración hacia este libro es de un cinco sobre cinco.
Me ha gustado mucho la historia, y los giros que va dando, notando todos los estados anímicos por los que pasa Ana, desespero, añoranza…amor.
Me ha sorprendido otro giro que da, cuando piensas que todo va a salir bien, ¡zasca y vuelta a empezar!
Lo único que no me ha gustado es que algunos capítulos eran muy largos, a mí me gusta que sean cortitos para así, si tengo que parar por cualquier circunstancia me gusta hacerlo siempre al final de los capítulos, pero aquí había algunos que eran el doble y triple que los cortos.
Ivette Chardis descubrió desde muy pequeña que aparte de leer, lo que más le gustaba era escribir. La llenaba de paz y la envolvía de una esperanza alentadora. Enseguida advirtió que el pasado la intrigaba, era esa parte oscura que se escondía a los ojos de los demás lo que más le atraía, y por eso decidió estudiar historia. Nunca dejó de escribir, se presentó a algún concurso que otro de relatos y llegó a ser mención de honor. Escribió artículos para blogs y portales de Internet, colaboró en radio y en televisión, hasta dio clases de escritura creativa. Pero otra trama más importante la mantuvo ocupada, su propia vida. El amor la alcanzó muy joven, enseguida adivinó que estaba ante su príncipe y no dejó pasar su oportunidad. Las circunstancias, la familia, la alejaron cada vez más de su pasión: contar historias. Hasta que un día su hija le preguntó: «¿Mamá por qué no escribes una novela?». Y se dio cuenta de que había llegado el momento.
Un café entre sueños de papel 